Síndrome de Peter Pan y el miedo a crecer

Hola a todos y bienvenidos al blog de Psicología de Clínica Fuensalud. Esta semana vamos a hablaros de un tema que seguramente lo has escuchado, pero que no sabes muy bien los motivos por los que se desarrollan. Este tema al que estamos haciendo referencia es sobre el Síndrome de Peter Pan.

Si te quedas conmigo a lo largo de este artículo, descubrirás que es un tema muy interesante y además te sorprenderán muchas cosas que vamos a ir desarrollando. ¿Comenzamos?

Introducción

Desarrollarnos y crecer como personas, es un hecho natural de la vida de una persona. Pero estarás de acuerdo conmigo que desde luego no es una tarea fácil. Ya que muchas veces nos encontramos con pequeños obstáculos a lo largo de la vida que nos hacen ralentizar nuestro desarrollo.

Cuando se pasa de adolescente a adulto, debemos tomar una serie de decisiones que van a ser determinantes para nuestro desarrollo o bien para alcanzar unos objetivos marcados. Esta toma de decisiones lleva implícito muchas veces una serie de cosas tales como:

• El tener que renunciar a ciertas cosas.
• Responsabilizarse de nuestras decisiones erróneas.
• Y aceptar las frustraciones que nos podemos llevar a lo largo del día a día.

Pero el hecho que maduremos, no significa en ninguno de los casos, que tengamos que renunciar al niño que llevamos dentro, siempre es bueno dejarlo salir en alguna que otra ocasión. De hecho, es bueno porque esto nos evitará salir de una vida rígida y llena de responsabilidades.

El éxito de la maduración consiste en buscar el equilibrio perfecto entre el niño que llevamos dentro y la maduración.

El problema llega cuando nos comportamos de manera constante y permanente como un niño, obstaculizando o impidiéndonos que nos desarrollemos con un adulto.

A esto se le conoce como el Síndrome de Peter Pan.

¿Qué es el Síndrome de Peter Pan?

El Síndrome de Peter Pan se puede definir como un síndrome que sufren algunas personas en las que se han quedado estancados en su infancia, presentando miedo o temor a crecer.

Presentando cierto grado de inmadurez en algunos aspectos psicológicos y sociales. Este grado de inmadurez va a provocar que la persona presente dificultades en sus relaciones afectivas y además en su desarrollo personal.

Este síndrome hace que las personas que lo sufren sean incapaces de comportarse como un adulto y además se ven completamente incapacitados para tomar las riendas de las responsabilidades que conlleva una vida madura.

Es decir, son incapaces y además se niegan a crecer, convirtiéndose en unos jóvenes eternos.

Este síndrome recibe este nombre haciendo referencia al personaje de Peter Pan.

Hoy en día el Síndrome de Peter Pan no se considera una enfermedad psicológica, pero si desarrolla una serie de características y de comportamientos, que hace factible y adecuado el tratamiento psicológico de las personas que lo sufren.

Un dato que debemos tener en cuenta, es que este síndrome sólo afecta a adultos y en la mayoría hombres. No podemos decir que este síndrome lo pueden padecer los adolescentes, ya que estos están más pendientes y preocupados de lo que le pueda deparar la vida adulta.

¿Cuáles son los desencadenantes que conducen al Síndrome de Peter Pan?

Por lo general y basándonos en estudios, podemos decir que las personas que sufren de este síndrome pueden ser debido a dos razones o causas:

1.- Que la persona haya tenido una infancia tan sumamente feliz, en la que estaba muy arropado y ausente de toda responsabilidad. Por ello lo que intentan es alargar y mantener este estado de felicidad total toda su vida, negándose por completo a superarla.

2.- Pero por otro lado tenemos los casos que son completamente opuestos. Es decir, nos podemos encontrar con personas que no han sido nada felices a lo largo de su infancia y que además han tenido la carencia de afecto por parte de las personas que les rodeaban. En este caso estas personas desarrollan este síndrome, debido a que quieren vivir una infancia y recuperar el tiempo perdido.

Sea cual fuere la causa o el origen para desarrollar el Síndrome de Peter Pan, son personas que han optado por conservar una infancia que al fin y al cabo es psicológica. Provocando con ello el evitar enfrentarse a los diferentes desafíos o retos que les pueda presentar la vida. De esta manera se convierten en personas que les cuesta o tienen muchas dificultades para tomar responsabilidades, decisiones, marcarse objetivos o bien comprometerse.

Es decir, se convierten en personas que se refugian en la mentira, la fantasía y la huida constante. Llegando esto a afectar tanto a nivel personal, como social o en el trabajo.

¿Qué Síntomas presenta el Síndrome de Peter Pan?

Como hemos comentado anteriormente el Síndrome de Peter Pan no es considerada una enfermedad mental. Pero a nivel Psicológico si se puede tratar, ya que la persona que padece este síndrome presenta unas características muy específicas tanto a nivel emocional, como en su personalidad. Y es aquí dónde podemos intervenir los Psicólogos para resolver estos conflictos.

Ya se ha comentado que por lo general lo suelen sufrir los hombres, presentando estos los siguientes síntomas:

• Siempre van a buscar que las personas que estén a su alrededor estén constantemente atentos a ellos.
• Esta búsqueda de atención va a ser debido a que van a necesitar que las personas que están cerca de él, le cuiden y le protejan.
• Intenta constantemente cumplir sus deseos. Esto le hace estar permanentemente pidiendo o bien criticando a las personas más cercanas a su entorno. Esto le hacer ser una persona egoísta, ya que si no lo consigue se enfada y se frustra. Es decir, él mismo no se esfuerza en conseguir lo que quiere, es más fácil que lo haga otro, sin pararse a pensar en los problemas o la situación de la otra persona.
• Como consecuencia del punto anterior, suelen ser personas que nunca están satisfechas con lo que tienen.
• Necesitan el afecto constante de otra persona, pero sin embargo ellos no son capaces de dar cariño.
• Nunca se hacen responsables de sus actos. Para ello siempre hacen uso de la mentira, de las excusas y del engaño.
• Esta incapacidad para crecer les hace estar siempre pensando en la eterna juventud.
• Por lo general suelen tener un comportamiento y pensamientos negativos. E incluso pueden llegar a presentar cierto grado de rebeldía.

• Son personas muy inseguras.

• Presentan una baja autoestima. Y como consecuencia de ella, es muy habitual que tengan una baja tolerancia a la frustración que hemos comentado en uno de los puntos anteriores.
• Debido al tipo de comportamiento que tienen, suelen presentar problemas para las relaciones sociales, llegando incluso a sentirse aislados y solos. Por eso es frecuente que tenga o sientan miedo a la soledad, porque si están solos ¿quién les va a satisfacer todos sus caprichos?

Como habéis podido comprobar las personas que padecen este síndrome, tienen unas características un tanto peculiares, provocando unas consecuencias que pueden llegar a afectar sus relaciones sociales, laborales e incluso amorosas o de pareja.

A continuación, en el siguiente punto vamos a desarrollar las consecuencias que esto puede desencadenar.

¿Qué consecuencias desencadena el Síndrome de Peter Pan?

Al ser adultos atrapados en una mentalidad de niños, tienen a no asumir responsabilidades.

Esto va a provocar que todo su mundo se tambaleé en todos los sentidos.

1.- A NIVEL SOCIAL Y LABORAL

Cuando estamos ante una persona de estas características, la primera sensación que nos da es que es muy segura de sí misma, llegando incluso en algunas ocasiones parecer algo arrogante. Pero esto está muy lejos de la realidad, ya que como hemos comentado anteriormente suelen tener una baja autoestima.

Además, suelen ser personas que tienen una gran creatividad e ingenio, pudiendo llegar a ser una persona muy trabajadora y un gran profesional.

Pero esto es sólo un espejismo de lo que en realidad esconden estas personas, ya que todo se desmorona rápidamente, debido a su falta de compromiso, a las exigencias a las que somete a las personas que le rodea y a la desconfianza que transmite en ocasiones.

Por eso es muy difícil que puedan entablar grandes lazos de amistad o puedan mantener durante mucho tiempo un mismo trabajo.

2.- A NIVEL SENTIMENTAL

Las relaciones de pareja de las personas que sufren este síndrome se hacen muy complicadas. Por eso es que la mayoría de los hombres con el Síndrome de Peter Pan, suelen estar solteros.

Pero aquellos que tienen pareja, suele ser una relación fría y superficial, debido a la falta de compromiso. Pero además, la mayoría pasan de estar arropados por el nido familiar (sobre todo por la imagen materna), a estar conviviendo con su pareja, de esta manera nunca están solos y por ello no son capaces de tomar las riendas y hacerse cargo de su vida.

¿Cómo podemos prevenir el Síndrome de Peter Pan?

La clave para no padecer este síndrome es la prevención. Es decir, depende de los padres cuando los niños son pequeños y se debe trabajar desde la infancia.

Cuando los niños son pequeños todos los padres debemos darles todo el amor a nuestros hijos, pero también debemos educarles marcándoles unas pautas para una buena conducta. Pero además es necesario ir dando a los más pequeños de la casa diferentes responsabilidades adecuadas a su edad.

De esta manera el niño irá enfrentando a una serie de problemas y tendrá que ir afrontando diferentes retos correspondientes a la edad que tenga.

De esta manera nuestros hijos serán felices (porque le damos todo nuestro amor incondicional) pero además desarrollan estrategias para resolver conflictos y problemas, convirtiéndose en niños resolutivos y no dependientes.

¿Psicológicamente cómo se trata el Síndrome de Peter Pan?

Cuando estamos en la consulta, debemos tener muy claro que estamos ante este síndrome. Ya que debemos evitar confundirlo con otras patologías como por ejemplo autismo o el Síndrome de Asperger.

Una vez hecho este inciso, el Síndrome de Peter Pan se debe tratar lo antes posible, desde que tenemos indicios o sospechas que algo no va bien.

Los Psicólogos lo primero que debemos hacer es detectar cuáles son las conductas infantiles e inmaduras que ven mermada su vida como persona adulta. Pero además también debemos averiguar el origen o el porqué ha desarrollado este síndrome.

Como hemos comentado anteriormente, estas personas suelen tener un nivel muy bajo de autoestima, mostrándose además muy inseguras. Por lo que, si queremos que nuestro tratamiento sea un éxito y satisfactorio para el paciente, son dos aspectos que no demos olvidar y que debemos tratar.

Tratamiento Psicológico de los pacientes que sufren el Síndrome de Peter Pan:

• A lo largo de la terapia debemos enseñar al paciente cuáles son los roles que lleva implícito la vida de una persona adulta.
• También es importante enseñarles cuál es la verdadera realidad y hacerles ver que la realidad que ellos viven no es la correcta o la adecuada para una persona adulta.
• Es importante hacer ver al paciente que en la vida de un adulto siempre existen responsabilidades a las que se deben hacer frente. Pues bien, una vez que el paciente va asumiendo responsabilidades debemos ayudarle y marcarle una serie de pautas o de estrategias para que le resulte fácil y cómodo resolver los posibles conflictos que surjan de estas responsabilidades.
• Hay que hacerles ver y entender que todo el mundo no gira a su alrededor y que el resto de las personas que les rodean no pueden estar constantemente pendientes de ellos, ni tampoco pueden estar satisfaciendo sus deseos u órdenes. Debe aprender a ser algo más empático con las otras personas y no tan egoísta.
• Así pues otra parte importante del tratamiento es aprender a aceptar los errores, para que no aparezca la frustración constante a la que estaban inmersos con este síndrome.

Cómo hemos comentado antes, el tratamiento que hemos expuesto es muy general.

Todos los tratamientos deben ser planteados de manera personal para cada paciente.

Tenemos que tener en cuenta muchos factores, para ayudar al paciente que poco a poco vaya madurando y que su edad emocional se corresponda con su edad cronológica.

Bueno hasta aquí este artículo sobre el Síndrome de Peter Pan. Espero que os haya sido de utilidad y que hayáis aprendido algo más de esta enfermedad. O bien que os haya despejado alguna duda que tuvierais sobre ella.

De todos modos, si a lo largo del artículo os han surgido alguna duda o pregunta, no dudéis en dejarnos vuestras inquietudes en el apartado de comentarios y las contestaremos.

Recuerda en compartir este artículo, ya que puede ser de gran utilidad para muchas personas.

Clínica Fuensalud. Departamento de Psicología