¿Estoy Inmerso en una Relación Tóxica? por Clínica Fuensalud

¿Relación Tóxica?

Bienvenido de nuevo a nuestro blog de Psicología. En esta ocasión trataremos sobre un tema que es de actual interés. Hablaremos sobre las relaciones tóxicas. A lo largo del artículo podrás averiguar cómo identificar una relación tóxica. Pero además te daremos consejos para que puedas salir de ella.

Si te parece bien vamos a comenzar a desarrollar este artículo.

Introducción

Cuando una persona se imagina o se plantea su futuro, la mayoría de las veces siempre se ve al lado de una persona con la que pueda envejecer. Es decir, siempre pensamos en la compañera o el compañero de viaje ideal.

Y cuando estamos inmersos en nuestros pensamientos ideando nuestro futuro, la mayoría de las veces queremos que la persona que esté a nuestro lado sea una persona que nos comprenda, que nos apoye, que nos mime, que sea nuestro mejor amigo o amiga…Vaya tenemos el pensamiento de querer una vida de un cuento de hadas.

Pero a veces, las relaciones no son como nosotros pensamos o como nosotros queremos que sean.

En ocasiones, una relación se puede convertir en un callejón sin salida, en la que no ves la luz al final del camino. Y en la que constantemente te preguntas si eres feliz y te dices constantemente que te mereces ser feliz.

Cuando se llega a este extremo de la búsqueda necesaria de la felicidad, es porque la persona que está a tu lado no es la indicada para ti.

Todos sabemos que como se suele decir que “en toda relación de pareja cuecen habas”. Toda relación de pareja tiene sus altos y sus bajos. Esto es porque en ocasiones la convivencia se hace un poco más cuesta arriba por una serie de circunstancias.

Pero lo importante es saber buscar el equilibrio entre ambas partes y eso es lo más importante. Hay que saber dar y recibir en una relación de pareja.

Pero cuando una relación no es equilibrada y una de las partes cede constantemente y se debilita, es cuando comienzan los problemas. Es aquí cuando podemos decir que la relación es tóxica.

¿Qué es una relación tóxica?

Podemos definir que una relación es tóxica cuando una o ambas partes no dejan de sufrir y se convierten en personas tristes, apagadas e infelices.

Esto puede llevar a padecer un desgaste emocional bastante importante, que por supuesto se va a ver reflejado en la convivencia del día a día. Desencadenando en circunstancias un tanto incómodas, pero de las que no se sabe por qué no podemos salir y nos llegamos a sentir atrapados.

Es importante señalar que una relación tóxica no sólo se puede dar en el ámbito de pareja, ya que también nos podemos ver envueltos en una relación tóxica en otros campos como por ejemplo en la familia, laboral o bien en un ámbito de amistad.

Por lo tanto, podemos decir que una relación es tóxica cuando vas cambiando aspectos de tu vida que no quieres y que te llevan a ser infeliz.

Tipos de relaciones tóxicas

Desde el punto de vista de la Psicología podemos hacer una clasificación de los diferentes tipos de relaciones tóxicas que existen, en función de las conductas.

Esta clasificación es la siguiente:

1.- RELACIÓN TÓXICA A TRAVÉS DE LA BURLA Y EL DESPRECIO

Son aquellas relaciones en las que una parte de la pareja hace menosprecio de algún aspecto de la otra parte.

Una característica de este tipo de relación tóxica es que esta burla siempre se hace desde el punto de vista de la broma o del humor, denigrando a la otra persona.

La otra parte de la pareja ante este ataque se siente indefenso e inferior a los demás. Pero además, como se hace desde el punto de vista de la broma no sabe cómo reaccionar.

2.- RELACIÓN TÓXICA A TRAVÉS DE LA PROVOCACIÓN

Cuando en una relación una de las partes recibe algún tipo de crítica o comentario que no sea de su gusto o de su agrado, la manera que tiene de hacer entender que no le ha gustado es por medio de una provocación.

Este tipo de relación tóxica se caracteriza ya que la persona ofendida deja de hablar a la otra parte durante días, ignorándola por completo y haciéndole el vacío. Podemos decir que esto es una provocación en toda regla.

Aunque en otras ocasiones la provocación puede venir a través de un mal gesto, de un mal carácter o de un enfado simplemente por haber recibido una crítica que por lo general suele ser constructiva y nada ofensiva.

Esto hace que una de las partes de la pareja genere cierto grado de miedo a decir o comentar algo que le pueda molestar a su pareja. Anulando con ello todo pensamiento que pueda emitir.

3.- RELACIÓN TÓXICA DE SENTIMIENTO DE CULPA

En este tipo de relaciones una de las partes siempre intenta hacer culpable a la otra persona de lo sucedido, haciéndole sentir mal.

El objetivo de este tipo de estrategia es intentar tener el control total y absoluto de la pareja, haciéndole o dando a entender que todo lo malo que pueda suceder es consecuencia de ella o de él.

4.- RELACIÓN TÓXICA DE INDEPENDENCIA

Este tipo de relaciones se caracterizan ya que una parte de la pareja es excesivamente independiente y no cuenta en absoluto con su pareja.

Nunca cuenta con su pareja para hacer planes o para cumplir sueños, la deja por completo a un lado.

Esto con el paso del tiempo hace mella en la pareja, ya que la otra parte no se siente útil en la relación y se siente como un objeto.

La sensación que se genera es de falta de compromiso.

5.- RELACIÓN TÓXICA DE POSESIÓN Y DE CONTROL

Este tipo de relación tóxica quizás es la más dañina, ya que la falta de confianza de una de las partes, le hace llevar a intentar tener el control total y absoluto de su pareja.

Quiere saber en todo momento dónde está, porque ha salido y con quién ha salido. En definitiva, no quiere que su pareja tenga contacto alguno con otra persona. Su pareja es solo y exclusivamente para él o para ella.

Esta situación de desconfianza hace sentir a la otra persona como si estuviera en una jaula privado o privada de libertad. Y por miedo a un enfado o un enfrentamiento deja poco a poco de hacer ciertas cosas o deja de salir con ciertas personas con tal de evitar enojos y discusiones con su pareja.

6.- RELACIÓN TÓXICA DE INTERÉS

Cuando en las consultas de Psicología nos encontramos con este tipo de relaciones es muy difícil dar a entenderles lo que está sucediendo.

Esto es debido que una de las partes o incluso ambas partes, se utilizan el uno al otro para poder conseguir un objetivo. Pero además existe un agravante en este tipo de relación tóxica y es que nunca se está conforme con lo que se consigue, de tal manera que siempre se quiere más y más.

En el caso que una de las partes de la pareja sea que utiliza al otro, nunca se sentirá complacido o complacida y por lo tanto siempre buscará la manera de “exprimirlo o exprimirla” sin nunca conseguir saciarse del todo.

Causas de una Relación Tóxica

No podemos afirmar o decir una única causa por la que se desarrolla una relación tóxica. Por lo general es una unión de muchos factores.

Entre la multitud de factores por los que se desencadena una relación tóxica podemos destacar:

  • Por un lado por una mala experiencia o por falta de afecto en la infancia. A veces cuando somos niños vemos y experimentamos cosas que después a lo largo de nuestra vida pueden hacer mella y verse reflejado en nuestra vida de adultos.
  • Aunque en otras ocasiones a una de las partes de la pareja adopta el papel de verdugo y otro de víctima. De tal manera que ambas partes sufren y se hacen daño mutuamente.

El que adopta el papel de verdugo tiene un papel más activo en la relación, mientras que el que adopta el papel de víctima el papel que juega en la relación es más pasiva, dejándose llevar por las circunstancias y por su pareja.

  • Otra causa y quizás la más importante es que la persona que intenta manipular la relación y controlarla suele tener un nivel de autoestima y una frustración muy bajo. Es por ello que esa frustración la refleja en la relación. De esta manera intenta hacerse valer y notar.
  • En otras ocasiones la persona que sufre suele tener dependencia emocional, llegando a pensar que su vida sin su pareja no tendría sentido y no sabría vivir sin ella.

Este punto está muy relacionado con la presencia de una baja autoestima de la persona que es víctima.

Por lo tanto podemos decir, que la baja autoestima en una relación tóxica en muchas ocasiones está presente por ambas partes de la pareja.

  • Y por último podemos nombrar otra causa y es la presencia de ciertas inseguridades en la persona que sufre o que adopta el papel de víctima. Siendo por lo tanto una “presa fácil” para la persona que dinamita la relación.

¿Debo hacer terapia para salir de una Relación Tóxica?

En ocasiones la relación tóxica de una pareja está un punto sin retorno y muchas de las veces (aunque se haya intentado) no sabemos cómo salir de ese callejón sin salida.

Lo que sí se tiene claro es que se está inmerso en una relación que no es sana, en la que se sufre y uno no es feliz. Y que además se quiere luchar por la pareja, por el gran cariño y afecto que existe.

Es por ello, que cuando se ha intentado todo lo posible para salir y encauzar una relación tóxica y no se ha conseguido avanzar nada, es necesario buscar ayuda externa. Que en este caso es la ayuda de un Psicólogo.

El Psicólogo va ayudar a ambas partes, gracias a la terapia de pareja.

¿Cómo me puede ayudar un Psicólogo a salir de una relación Tóxica?

1.- El primer paso y quizás el más importante es reconocer que se está inmerso en una relación tóxica y querer cambiar el rumbo de la relación.

2.- Otro aspecto fundamental es dar a entender a una de las partes de la relación que su actitud o su comportamiento no está beneficiando a la relación y que produce dolor en su pareja.

3.- Seguidamente en la terapia es importante trabajar un aspecto fundamental que es la comunicación.

Se debe establecer unos parámetros fundamentales de comunicación y que deben ser cumplidos por ambas partes.

De esta manera ambas partes deben explicar al otro cómo se siente y lo que piensa cuando se produce un ataque o una ofensa.

Esta comunicación se debe realizar siempre desde el respeto y cariño. Evitando en todo momento la confrontación o la discusión.

Así poco a poco ambos sabrán el pensamiento del otro, evitando con ello intentar hacer daño.

Este es un aspecto importante para el Psicólogo, ya que en las terapias intentaremos que nuestra pareja se comunique de manera abierta y sin miedos. Así pues, recopilaremos más información de ambos, para poder focalizar mejor las pautas a seguir en la terapia.

4.- Es importante trabajar aquellos puntos débiles o las causas por la que se ha llegado a tener una relación tóxica.

Es decir, se trabajarán los miedos, las inseguridades, la desconfianza y la baja autoestima, entre otros muchos aspectos.

Son muchos aspectos a trabajar, pero sin duda alguna se consigue mejorarlos, generando un gran giro positivo a la relación de pareja.

Conclusión

Todas las relaciones de pareja tienen sus altos y sus bajos, porque no siempre la convivencia es todo lo ideal como uno espera.

Pero en ocasiones esta convivencia se hace insoportable, ya que nuestra pareja nos hace sufrir más de lo normal, haciéndonos sentir infelices.

Cuando se llega a este extremo, podemos decir que estamos inmersos en una relación tóxica, que no llega a ninguna parte. Sólo llega al dolor y al sufrimiento. Llegando incluso a anularnos por completo como persona.

Lo importante de estas relaciones es saber identificar que estamos en envueltos en una relación tóxica y que queremos salir de ella. Para seguidamente comenzar con una terapia de pareja para poder solucionar el problema focalizándolo o basándonos en las causas que lo ha generado.

Espero que este artículo haya sido de tu interés y que te haya ayudado a identificar una relación tóxica.

Si tienes alguna duda o pregunta, lo puedes hacer en el apartado de comentarios. Pero si quieres hacer tu consulta de manera privada, no dudes en llamar a nuestro Centro.

Y recuerda compartir este artículo en tus Redes Sociales, ya que otras personas se pueden beneficiar de esta información.

Clínica Fuensalud, Departamento de Psicología

Colegio Oficial de la Psicología de Madrid (copmadrid.org)

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